La torre de ascensores Halo Vigo está rematada con un anillo visible desde diferentes puntos de la ciudad gallega de Vigo. Situado en la calle Serafín Avendaño, el ascensor urbano conecta la cubierta de la estación intermodal de Vigo —un proyecto de la firma Morphosis, liderada por Tom Mayne, compuesto por una estación de AVE, una estación de autobuses y un centro comercial— y la zona de la avenida García Barbón, y las calles Rosalía de Castro y Areal, 50 metros más abajo.

La propuesta consta de una torre de base trapezoidal de aproximadamente 6x6 metros para albergar dos ascensores con capacidad de 21 personas, cada uno, y una pasarela peatonal suspendida en forma de círculo con 90 metros de diámetro. En lo alto de la torre se divide el acceso peatonal a la cubierta de la estación intermodal en dos arcos que forman el anillo. Estos se apoyan a cada lado en el volumen vidriado del atrio panorámico central que emerge del techo de la estación intermodal. El recorrido en el arco este se realiza dentro del perfil del arco, preservando la intimidad de los habitantes de las torres residenciales de la avenida García Barbón. El recorrido del arco oeste se realiza al aire libre, sobre el perfil, para disfrutar de las vistas al entorno. En cuanto a la materialidad de esta pieza urbana, la cara frontal de la torre y la cara exterior del círculo están realizadas en vidrio serigrafiado. Los forjados y perfiles de pared se recubren con chapa de acero lacada en blanca, ocultando las estructuras de acero y hormigón.